El 11 de mayo de 1930 fallecía en Limón, el famoso aviador mexicano Pablo Sidar Puras (conocido como Pablo Sidar Escobar), al tratar de llevar acabo su proyecto de volar sin interrupción desde Cerro Loco, Oaxaca hasta Ezeiza en Buenos Aires, Argentina. Sidar iba acompañado del copiloto Carlos Rovirosa, los cuales tenían planes de alcanzar Buenos Aires con un tiempo promedio de 40 horas de vuelo sin escalas. Su avance hacia Buenos Aires fue en paralelo a la costa Pacífica, pero a la altura de Puntarenas se encontraron con una gran tormenta que hizo que cambiaran de ruta, de forma tal que decidieron atravesar Costa Rica y esquivar la tormenta siguiendo la línea de costa de Limón.Sobrevolando el sector de Siquirres se percataron de que las condiciones locales eran sumamente adversas, pero no desistieron, por tanto siguieron la línea de costa, pero al alcanzar el sector de playa Cieneguita a eso de las 17:00h, se toparon con otra tormenta, aún mucho más intensa y el avión Emsco B-3, bautizado como Morelos, no pudo mantener la estabilidad y fue arrojado contra las aguas del mar Caribe.El impacto fue tal, que ambos fallecieron. Es probable que si alguno de los dos sobrevivió al impacto, muy probablemente terminase por ahogarse tras el fuerte oleaje que se presentó aquel día.
¿Comidos por tiburones?
Según describió un artículo de la revista del Ejército y de la Marina mexicana, al caer el avión Emsco B-3 Morelos al mar, frente a playa Cieneguita, Sidar y Rovirosa fueron atacados por hambrientos tiburones que en el caso de Rovirosa, sólo pudieron darle uno que otro mordisco; en el caso de Sidar, su cadaver quedó bastante desfigurado.Sin embargo, es probable que el ataque de tiburones a los cuerpos de los aviadores, tan solo haya sido un factor más que se sumó a la tragedia; pues tras el choque contra el mar, el avión quedó destrozado, haciendo suponer que la muerte debió ser instantánea.Y lo anterior queda en evidencia en los telegramas emitidos el mismo día del hallazgo del avión al dar las 5:00pm de ese domingo 11 de mayo de 1930.
Hallazgo del avión
Según narraron las personas que lo encontraron, el avión yacía enclavado en el mar, a 20 metros de la playa, mar adentro, y a 200 metros del actual aeropuerto internacional de Limón. El aguacero que inició minutos antes de las 5:00pm no finalizó sino hasta las 6:30pm, haciendo dificultosa la acción de rescatar los cuerpos de los dos aviadores mexicanos.De dicho avión se logró sacar el cuerpo mutilado de Sidar, el cual tuvo que ser embalsamado por el médico de la United Fruit Company, Dr. Salisbury.Según un telegrama con fecha del 12 de mayo, el avión habría sido embestido por intensas ráfagas de viento así como por un intenso aguacero, haciendo que el motor de la aeronave explotara en el aire y se precipitara a tierra, donde cayó en el mar y se incrustó en el suelo.El impacto fue tan severo, que el cuerpo del coronel Sidar fue desmembrado, perdiendo la pierna derecha y el brazo izquierdo.Al pasar las horas, fue encontrado en la playa una parte del pulmón de Sidar.
El aviador que nunca fue hallado
En el caso de Rovirosa, y luego de la inspección realizada por aviadores estadounidenses, se estimó que el copiloto Rovirosa saltó del avión en paracaídas antes de que la aeronave se estrellara contra el mar. Sin embargo, para su mala fortuna, de nada le sirvió el paracaídas, porque nunca apareció rastro de él, muy probablemente falleció también por el impacto debido a que seguramente activó el paracaídas muy tarde y terminase por ahogarse en aquella tempestuosa tarde noche del domingo 11 de mayo de 1930.
El cuerpo de Rovirosa jamás fue hallado.
